Barcelona-Taipei

Os presento a Candy

Hoy ha sido un día poco fructífero en cuanto a explorar Taipei. Por la mañana hemos ido al laboratorio unas horitas y por la tarde hemos aprovechado para ir a la feria de electrónica en el World Trade Center de Taipei.
Aquello era una nave gigante repleta de stands de todas las principales (y no tan principales) marcas, Canon, Samsung, Sony, Olympus, Pentax... una locura de la gente que había y un agobio de todos los vendedores que querían darte su catálogo para que miraras y compraras algo. Había de todo, desde teles hasta neveras, portátiles, cámaras, USB, aire acondicionado... y todo a muy buen precio.
Yo me he enamorado de una camarita muy mona que hemos visto por 8900 NT$ (unos 180 euros).
No es una gran cámara, tampoco quería (ni podía xD) comprarme nada espectacular, pero me ha parecido una buena oportunidad. Incluye opciones manuales y no se cuantas cosillas más que me tengo que acabar de mirar XD. Es de 10 megapixels y zoom óptico de 12x.
En el precio me han incluido un tripode (que ya tengo, pero no me lo he traído xD) y una tarjeta de 4Gb. Lo bueno es que puedo utilizar las tarjetas "xD" que utiliza la anterior cámara Olympus, así que genial.
Por cierto, la he llamado Candy (Laura me ha ayudado XDXD)

Esta ha sido la primera foto que he hecho al salir del World Trade Center, ¿a que mola? :P

La última cosa por hoy: hemos ido a cenar a un centro comercial aquí cerca del hotel, y hemos salido justo cuando empezaban a cerrar (22:00 o así). Ha sido muy gracioso porque al ir hacia la salida, pasando por todos los puestos de marcas de belleza de la primera planta, todos los dependientes estaban puestos a un lado del mostrador (o detrás de él). Y a medida que ibamos pasando por delante de ellos, decían algo en chino y a continuación hacían una reverencia. ¡¡¡Pero qué leches es eso!!! Además todos, uno detrás de otro, y justo al lado de la puerta había 4 ó 5 puestos uno al lado del otro y lo han hecho todos a la vez, hablando todos al unísono. Menudas risas nos hemos hechado. Impresionante, oiga.

¡Ah! Y comentad, cacho perros, que ya que nos matamos a escribir hasta las tantas, nos gusta recibir respuesta como mínimo.

¡Con Dios!